sábado, 13 de febrero de 2016

LA FAMILIA COMO UNIDAD FORMATIVA

La familia es el pilar fundamental de cualquier individuo desde su nacimiento hasta su independencia. Y aún en ese entonces, la relación con su familia, considerando que fuese buena y fructífera, es irreemplazable e inmortal.

Lamentablemente, existen casos en los que las figuras parentales no brindan a su primogénito el amor que este necesita para progresar. No cuidan de él, ni le enseñan los valores morales para convertirlo en una persona plena; y es entonces donde si no cuenta con alguna otra figura protectora, ¿de dónde obtendrá este individuo una distinción de lo que está bien y de lo que está mal? La falta de comunicación fomenta la disfuncionabilidad de la misma.

Por esta misma razón, es primordial que la base de una familia sea fuerte.
Que los primogénitos tengan deseos de tener un hijo para hacerlo una persona completa mediante su educación, o de lo contrario que no lo tengan. No importa en lo absoluto la situación económica de la familia mientras que ésta tenga como prioridad el cariño mutuo, el interés en su bienestar, la demostración constante de apoyo y un hombro disponible para cuando uno de sus miembros lo necesite. El status social no determina a las personas mientras su base familiar sea la correcta, pues indiferentemente de su nivel económico puede existir distanciamiento, conflictos, y mala crianza, en estratos mas humildes al tener menos recursos usualmente las familias son mas unidas y suelen apoyarse con mas fuerza, pues si no cuentan con nada mas pueden contar entre ellos.

Además de siempre motivar a sus hijos a ser mejores personas y desarrollar su creatividad y talento mediante actividades didácticas recreativas.

Una de los aspectos más importantes de la familia es la igualdad de sus miembros. En familias numerosas, todos deben recibir la misma atención e importancia. Una de las cosas que más me llamó la atención de este tema es el cómo hemos evolucionado a partir del patriarcado, donde se toma al padre como figura principal de la familia, a la familia igualitaria. A que las mujeres tengan los mismos derechos de trabajar día a día por su familia en lugar de quedarse en casa porque la sociedad lo demanda en lugar de por voluntad propia.

Por último, es importante resaltar que en Venezuela ahora más que nunca se necesita de padres que motiven a sus hijos a dirigirse por el mejor camino, para que en el futuro sean éstos quienes hagan del país uno mejor, uno con personas responsables que no permitan decadencia del mismo. Que combatan tantos problemas que existen actualmente con inteligencia y sabiduría, ya que es nuestra responsabilidad como venezolanos cambiar el futuro del mismo y no dejar que este país termine de deteriorarse.

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